A cuatro días de concluir brevísima campaña -12 días- por la Secretaría General de la Sección 51 del SNTE en Puebla, donde por primera vez los trabajadores de la educación votarán libremente, arrecian ataques, denostaciones y vituperios en contra de la única candidata, Dinora García Hernández, de las 8 planillas registradas, para tratar de descarrilarla, ante fundado temor de que se alce con el triunfo en los comicios del venidero martes 28.
Tal parece que hay un acuerdo soterrado entre Alfredo Gómez Palacios, Felipe Neri Morán, Salvador Torres Castillo, Juan Díaz de León, Virgilio Rodríguez, Juventino Sánchez Barrera y Juan Durán Martínez, para linchar a la maestra oriunda de Huauchinango.
Más ella no ha respondido.
Ni responderá.
Está abocada a recorrer el interior del Estado. A convencer a los 31 mil maestr@s y trabajador@s del magisterio poblano.
Tiene claro que la tercera es la vencida.
Que es la hora de la mujer.
Y reeditar el triunfo del año 2000 de Leticia Jasso, que la llevó a ser la primera mujer en dirigir la Sección 51.
Por lo que 23 años después… Dinora García va por ser la segunda mujer en ocupar la Secretaría General.
Por cierto, al hurgar en el archivo periodístico se localizaron notas del Congreso del SNTE de 2008, que refirieron:
… “Dinora García ganó la elección”.
… “Dinora rindió protesta como nueva Secretaria General”.
… “A los 15 minutos de haber sido declarada ganadora, los representes del SNTE la bajaron”.
…. “Cirilo Salas Hernández entra por Dinora García”.
Ella se disciplinó.
Le dijeron que sería la sucesora de Cirilo Salas.
En la elección del 2012 los enviados del Comité Ejecutivo Nacional le recetaron la misma dosis:
“Maestra, usted no será electa”.
“No inscriba su planilla”.
El ”bueno” fue Jorge Luis Barrera.
El “dedo divino” del SNTE la volvió a eliminar en la sucesión del 2016.
No la dejaron participar.
La línea del nacional fue para Jaime García Roque, el dirigente saliente.
Vale asentar, que hasta García Roque el SNTE realizó los congresos seccionales a “puerta cerrada” y únicamente ingresaban los delegados -420- que representaban a los 30 mil trabajadores del magisterio estatal.
O sea, el SNTE imponía a los delegados la línea por quién votar.
Por lo que el sufragio de la base sindical… “no existía”.
Reglas no escritas, que para bien o para mal, eran aceptadas.
Hoy esa historia cambió.
LOS “ENROQUES” DE
GARCÍA ROQUE
Vale también asentar que el candidato Salvador Torres Castillo es Secretario de Negociación Salarial sin nombramiento del Congreso de 2016, al ser impuesto por Jaime García Roque.
Más no fue el único enroque de Roque García.
Veamos.
Alfredo Gómez Palacios fue electo Secretario de Negociación Salarial.
Sabi Amaro en la Secretaría de Organización.
Gumersindo Herrera en Secretaría de Crédito.
Más el “dedo” de los enroques de Roque, durante su largo sexenio al frente del comité sindical –se extendió 2 años por la pandemia-, los reubicó:
Alfredo Palacio pasó a la cartera de Crédito.
Gumersindo a la de Organización.
Y Sabi Amaro se fue a casa.
Ni qué decir de Felipe Neri Morán, que fue incorporado al sindicato por el entonces dirigente Guillermo Aréchiga Santamaría -1992-, para continuar hasta el actual comité de Roque García.
Y con la “cachucha” de la organización priista de la CNOP, y el “brazo ejecutor” de la 28 de Octubre, Felipe Morán no le importó que su Informe de Secretarío de Finanzas fuera rechazado en asamblea y observada por los representantes del SNTE, quienes acordaron llevarlo al Comité de Vigilancia y Contraloría del Comité Nacional.
-Finalmente-, será el voto de los 31 mil trabajador@s de la educación estatal los que definirán el martes 28 de este mes quién será su nuevo líder.
¿Dinora García?
¿Alfredo Palacio, el “delfín” de Roque García?
¿Felipe Neri, el cenopista de la 28?
¿O Salvador Torres el Secretario “sin cartera”?
Al tiempo.
