Amables lectores los saludo con afecto y en esta entrega, quiero compartir mi indignación respecto a la violencia infantil, que es cada vez más recurrente, e iniciaré citando el caso de Fernando, un niño de 13 años de edad que fue encontrado degollado en el fondo de una barranca el pasado jueves 17 de mayo, en la zona de Tepeaca, Puebla, sumándose a la abultada cifra de homicidios de infantes en nuestro país.
En México se asesinan 4.87 menores de 19 años por cada cien mil, de acuerdo con la cifra de homicidios del 2016 del INEGI. Asimismo, según el último informe de UNICEF sobre violencia infantil, la tasa de homicidios de niños y adolescentes en México es equiparable a países en conflicto bélico como Irak y Sudán.
La violencia contra las niñas y los niños es el reflejo de la desensibilización social que existe actualmente, toda vez que la sociedad está más acostumbrada a ser espectadora de actos violentos y a reproducirlos como si se tratara de una moda, sin importar a quién o a quiénes se lastime.
La violencia infantil deja una cicatriz en aquellos casos en los que sobreviven y, cuando terminan con la vida del infante dejan una herida social profunda que nunca sanará, y me pregunto ¿acaso nuestra sociedad está tan descompuesta que el dolor de una niña o niño significa nada?
En el artículo 4o. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, establece que se antenderá el interés superior del niño o niña e indica que las sociedades y gobiernos deben de realizar el máximo esfuerzo posible para construir condiciones favorables a fin de que éstos puedan vivir y desplegar sus potencialidades. Esto lleva implícita la obligación de que, independientemente a las coyunturas políticas, sociales y económicas, deben asignarse todos los recursos posibles para garantizar este desarrollo. Depende de los adultos hacer efectivos estos derechos, protegiendo a ese sector de la población que es totalmente vulnerable.
¡Paremos los abusos en su contra y formemos mujeres y hombres libres de violencia!
Biografía: Jorge Pinto Tepoxtecatl
Es Abogado y candidato a Doctor en Derecho por la BUAP, donde se desempeña como profesor colaborador en la Facultad de Derecho y C.S., Abogado Asesor en la Defensoría de los Derechos Universitarios desde hace 16 años y es Director del Bufete Jurídico “Pinto y Asociados” S.C. Comentarios: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. / Twitter: @apjorge
