Es real… La Reforma al Poder Judicial Federal, que incluye dos puntos torales:
Ministros, Magistrados y Jueces de Distrito serán electos por voto ciudadano, y reestructuración del Consejo de la Judicatura Federal, cuyo titular ya no será el Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación –SCJN- y su operatividad será divida en dos segmentos: Tribunal de Disciplina Judicial y Órgano de Administración, innovación que finalmente aterrizará en las 32 entidades federativas de la República Mexicana.
Reforma que llegará a Puebla –como a las demás entidades- más tarde que temprano, o más temprano que tarde.
Se estima implementación se concrete en 2027.
Lo que lleva a la interrogante:
Una vez que cristalice la Reforma al Poder Judicial de Puebla… ¿terminará la histórica intromisión del Gobernador en turno al Tribunal Superior de Justicia –TSJ?
¿El TSJ, finalmente, será autónomo?
¿Romperá las cadenas que lo atan al Poder Ejecutivo?
Los hechos con su historia no mienten.
Desde los años 30 con los respectivos titulares del Ejecutivo, emanados del Partido Nacional Revolucionario –PNR-, del Partido de la Revolución Mexicana –PRM- y del extenso dominio del Partido Revolucionario Institucional –PRI-, el arribo al poder del Partido Acción Nacional y hoy con Morena.
En los años 30, 40, 50, 60 y 80, el inquilino de Palacio de Gobierno mantenía “sana distancia” con el Poder Judicial.
Cubría las formas.
-Pero-, sabía dónde y cómo apretar al Poder Judicial.
Y es en el presupuesto al TSJ, que obtiene a través de la Secretaría de Finanzas.
Ahí, ambos poderes llegaban acuerdos.
Así, al corte de hoy, han llevado la “fiesta en paz”.
MORENO VALLE HIZO Y DESHIZO EN EL TSJ
La “regla de oro” no escrita de la “sana distancia” la rompe el primer mandatario del PAN, Rafael Moreno Valle Rosas, quien dobló al Poder Judicial, quitó y puso magistrados, lo mismo que en la Presidencia del Tribunal Superior de Justicia al imponer a –“Boby” -Roberto Flores Toledano, oriundo de la Ciudad de México y sin experiencia alguna en el Poder Judicial.
¿Mérito de Boby?
Ser brother-brother de Rafael.
Fue el sexenio del terror, 2011-2017.
Juez o Magistrado que no se plegaba a los caprichos morenovallistas, sabía lo que le repararía el mañana… exilio o cárcel.
El ejemplo más contundente lo representó el Juez Enrique Romero Razo, que al no plegarse a la indicación de Casa Puebla sobre el caso del empresario Ricardo Henaine y Club de Futbol Puebla, fue cesado.
Y después de largo litigio, que concluyó en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, 6 años después, fue reinstalado en el TSJ.
El gobernador José Antonio Gali Fayad siguió los pasos de su “tutor político” –Moreno Valle- e impuso en la Presidencia del Tribunal Superior de Justicia al litigante Héctor Sánchez Sánchez.
Nada se movió durante el interinato de 7 meses del ex titular del Poder Judicial, Guillermo Pacheco Pulido.
Antes, mucho menos, en los 10 días de mandato de Martha Érika Alonso Hidalgo, quien murió trágicamente al desplomarse el helicóptero en que viajaba a la Ciudad de México, con su esposo Rafael Moreno Valle, el 24 de diciembre de 2018.
BARBOSA Y SALOMÓN CÉSPEDES SIGUIERON LOS PASOS DE RMV
Al arribo a Casa Aguayo de Miguel Barbosa Huerta la sujeción del TSJ no cambió, primero dejó que transitara Héctor Sánchez.
Después lo destapó como aspirante al Gobierno, para finalmente obligarlo a renunciar a la Presidencia, después cesarlo de Magistrado, obligarlo a irse por la puerta de atrás al abrirle Carpeta de Investigación en la Fiscalía General del Estado, por lo que tuvo que irse de Puebla.
En 2022, Barbosa Huerta presentó –con “fanfarrias”- su Reforma al Poder Judicial, para empoderar en la Presidencia del Consejo de la Judicatura a Carlos Palafox Galeana, era su Consejero Jurídico en el Gobierno, quien asumía manejo de plazas, recursos y nombramientos de jueces y magistrados.
Y pasó a segundo término la figura de Presidente del TSJ, que recayó en Irma Gayoso.
El gusto se fue al pozo de Carlos Palafox e Irma Gayoso, pues con la designación del Congreso del Estado de Gobernador Sustituto de Sergio Salomón Céspedes Peregrina… ambos “voluntariamente renunciaron al cargo”.
Y Salomón Céspedes puso a sus “fichas” Eduardo Hernández Sánchez en Presidencia del Consejo de la Judicatura, y al frente del TSJ a Belinda Aguilar Díaz.
O sea, las administraciones de Moreno Valle, Gali Fayad, Barbosa Huerta y Salomón Céspedes, sin importarle las formas, no dudaron en violentar la autonomía del Poder Judicial.
Ahí están los hechos.
De ahí, que con la reforma que se avecina con designación de jueces y magistrados a través del voto ciudadano, se inquiere:
¿Acabará la intromisión del gobernador en turno al Poder Judicial?
¿Dejará ser su coto de poder?
La palabra la tiene el Gobernador Electo, Alejandro Armenta Mier, que estará a frente de la administración 2024-2030.
Al tiempo.
