Hace unos días, un ex-alumno de preparatoria de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, fue asesinado en las calles de la ciudad, al intentar ser asaltado, además, en lo que va del año, van 83 feminicidios en la entidad, de acuerdo al portal de internet Página Negra, los asaltos a las rutas de transporte público continúan, los robos a casa habitación, la trata de personas que a pesar de los operativos que han realizado en el centro histórico no han sido suficientes para inhibirla y observamos que la trata en modalidad de explotación sexual y en modalidad de mendicidad forzada siguen floreciendo por muchos rincones del estado; las mujeres desaparecidas que son reportadas a diario, la extracción de hidrocarburos, la venta de estupefacientes en las calles de los municipios y de la capital, incluso en entrega a domicilio, estos y otros delitos, vulneran el estado de derecho y generan una percepción de inseguridad generalizada y las preguntas obligadas son: ¿Por qué no se respeta el Estado de Derecho? ¿Por qué no se respetan los Derechos Humanos?