Espiritualidad y toreo

Tlaxcala, Tlax. Esta noche a las 8 en punto, en la capital del estado tlaxcalteca, se reabrirá la plaza de toros “Jorge Aguilar El Ranchero “ para el festejo que se ha convertido en un referente del calendario taurino nacional, en la tradicional corrida de la gloria. La empresa anuncia el regreso a los ruedos del matador Alberto Ortega en mano a mano con el también tlaxcalteca Uriel Moreno “El Zapata”. Serán dos toros de Rancho Seco y cuatro de Vicencio para esta corrida la cual ya es una tradición entre los taurinos.

 

CORRIDA DE LA GLORIA

Un festejo que inició a las 4 de la tarde hace ya una década con la iniciativa de la empresa Espectáculos Taurinos del Altiplano que encabeza José Ángel López Lima y familia. Misma que nació como una opción para los taurinos de la región poblano tlaxcalteca y que no encontraban oferta después de la celebración espiritual de la semana mayor. Los primeros festejos se realizaron a las 4 de la tarde. La última ocasión que esta empresa organizó esta corrida fue en el 2014. Partieron plaza el caballista potosino Rodrigo Santos y a pie los matadores Federico Pizarro y el español Eduardo Gallo para lidiar toros de la cabaña brava de De Haro. Siendo el triunfador el hispano quien cortó una oreja a su segundo toro de la tarde.

Ya para el año siguiente el festejo se programó a las 8 de la noche en la encerrona del matador Uriel Moreno “El Zapata” con seis toros de diversas ganaderías tlaxcaltecas. En el 2016 también en corrida nocturna, se celebraron los 50 años de la cabaña brava de De Haro en la reaparición, después de grave percance sufrido en Puebla, del matador Zapata. Una jornada donde Uriel Moreno, por la tarde actuó en Texcoco y por la noche en Tlaxcala capital. En las últimas tres corridas de sábado de gloria ha sido anunciado el matador Zapata y desde sus  inicios de este festejo ha estado presente la sangre brava del estado de Tlaxcala. Esta noche no será la excepción. Pues aunque la ganadería de Vicencio se ubica en el estado de Puebla, la realidad es que comparte espacio físico con Tlaxcala, mientras que Rancho Seco es una dehesa enteramente del estado llamado “cuna de la nación”.

Por otra parte, el matador Alberto Ortega no regresa a Tlaxcala capital desde hace varios años,  veinte aproximadamente han pasado para que Alberto vuelva a partir plaza enfundado en terno de luces en este recinto llamado también “la tacita de plata”. Ahora bajo una etapa distinta en su vida profesional misma que goza de una trayectoria que pocos han consolidado como figura regional.

Los aficionados verán esta noche a dos toreros experimentados, con la capacidad técnica y física para enfrentar lo que salga por la puerta de los sustos. Una vez concluida la semana santa, vuelve a ponerse de manifiesto esa relación que existe entre el toreo y la espiritualidad. Desde el vestido de torear, propio de la época barroca como los retablos de las iglesias de la nueva España, hasta su manifestación de fe cuando un torero, ante la verdadera exposición de la vida a la hora de lidiar un toro bravo, ofrece su actuación al ser supremo. Esta noche, la edición 2017 de la corrida de La gloria.

 

Un cartel con sabor tlaxcalteca. Foto Ángel Sainos