El Doctor José Antonio Zamora Lomelí, comentó que el estado de salud del matador José Luis Angelino es delicado pero estable. Toda vez que “Diosito lo cuidó” y el golpe solamente provocó traumatismo cráneo encefálico sin llegar a consecuencias graves.
“Se encuentra consciente, tuvo pérdida de la memoria momentánea. Y de inmediato lo que quiso fue comer”, comentó el galeno que de inmediato estuvo al frente de las maniobras de atención al matador de Apizaco.
TARDE DE ANGUSTIA
La tarde había transcurrido en medio de las dificultades que presentan los toros con edad y con tendencia a tablas. Que en los medios tienden a salirse de la suerte y en el rincón de la querencia se defendían con cierta violencia.
Los matadores Domingo López Chaves, Jerónimo y José Luis Angelino habían estado por encima de las condiciones de sus enemigos. El cuarto de la tarde, para el matador hispano López Chaves había tenido mayor claridad en la embestida, desplazamiento y voluntad. Por lo que el matador estuvo firme con su ejemplar y coronó su faena con espadazo que facturó con la primera oreja de la tarde. Un festejo que se ponía complicado ante las condiciones que presentaron los toros. José Luis Angelino ante el anuncio del cierra plaza se fue a los medios y se puso de hinojos.
Se anunció la salida de “Coquetón”. Se abrió la puerta de chiqueros, apareció en medio del túnel el negro saino de La Soledad con salida incierta. José Luis quiso torear al enemigo pero la embestida no clara y en línea recta hizo que el torero se tirara al piso.
El toro saltó al matador pero con una pata golpeó la base del cráneo por el lado izquierdo. De inmediato José Luis Angelino quedó inerte en la arena. Se comenzó a convulsionar y se vivieron momentos de profunda angustia. La plaza quedó enmudecida ante la escena.
El torero sin recuperar el conocimiento, sangre en el rostro y sin mostrar signos de recuperación. Su apoderado Raúl Alducin, el novillero Gerardo Sánchez entre otros compañeros del medio arriesgaron sus vidas para salvar al amigo caído aún cuando el toro tenía una loca carrera por el ruedo. Ya en el callejón, la camilla rígida de inmediato permitió agilizar las maniobras de traslado del herido y fue llevado a la ambulancia para lograr su estabilidad.
Las manos expertas de los galenos y técnicos en urgencias fueron determinantes para la recuperación de José Luis Angelino. Hasta el cierre de esta edición el matador tlaxcalteca sigue bajo una evolución favorable.
Ha recuperado la conciencia y seguirá los cuidados médicos expedidos exprofeso. Su recuperación no solamente es satisfactoria sino que está por encima de las condiciones pronosticadas por los médicos. Lo que nuevamente nos lleva a la pregunta tradicional: de qué están hechos los toreros?