Vaya situación inédita en la vida política de México ha prevalecido en los últimos años, teniendo como eje rector el encono y confrontación entre los tres Poderes de la Nación: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, como nunca antes se había visto, donde un poder descalifica y desconoce a otro, y viceversa.
“Pecado social y vergüenza, defender privilegios en el Poder Judicial”, lanzó el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
El Ministro Luis María Aguilar Morales reviró: “El Poder Judicial toma sus decisiones en base a la Constitución, no por los intereses de la política ni de grupos sociales”.
El Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación –agrupa 67 secciones en el País-, que dirige Jesús Gilberto González, inició ayer un paro nacional de labores de seis días -concluye el 24-, después de que la Cámara de Diputados aprobó –el martes- la extinción de 13 fideicomisos de la Suprema Corte de Justicia y del Consejo de la Judicatura, que administran 15 mil millones de pesos y cuyo dinero esencialmente se destina a pagos extraordinarios de jubilaciones y pensiones de Ministros en activo, en retiro, Magistrados, Jueces y servicios médicos privados.
Por lo que el Ministro en retiro, José Ramón Cossío Díaz, presentó el primer amparo –“defender derechos laborales de quienes integran tribunales y juzgados”- contra la desaparición de 13 fideicomisos del Poder Judicial de la Federación, que decretó el pleno de la Cámara de Diputados, la cual fue turnada al Senado de la República para su ratificación.
López Obrador alertó:
Si las modificaciones del Legislativo se echan abajo… “representaría una ruptura al orden Constitucional”, en la que incurriría el propio Poder Judicial, pues desconocería y nulificaría a otro poder autónomo, como es el Legislativo, facultado para aprobar presupuestos y leyes.
-Coligió-, será la Suprema Corte la que defina al respecto, erigiéndose en juez y parte.
Entonces, ¿quién va a declarar inconstitucional lo que van a decidir soberanamente los legisladores por mayoría? Porque –martes- votaron, creo que fueron 250 votos a favor y 200 en contra. Pero ellos están dispuestos a no respetarlo
El Ministro Luis María Aguilar afirmó que los fondos –fideicomisos- apoyan la autonomía e independencia de jueces y magistrados. “Son para que estén tranquilos y puedan tener la independencia de servir al pueblo de México”.
Admitió: Es posible que la decisión de los diputados sobre los fideicomisos sea impugnada mediante acciones de inconstitucionalidad, las cuales serían resueltas por la propia Suprema Corte de Justicia de la Nación.
El presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial Federal –TEPJF-, Reyes Rodríguez Mondragón, sostuvo que juzgados y tribunales deben ser abiertos a la ciudadanía para ganarse su legitimidad.
“La justicia que se imparte desde el TEPJF tiene como misión brindar estabilidad y contribuir a la certeza y paz social”.
Para rematar:
“Se espera que nuestras sentencias estén razonadas con el poder del derecho, no con las razones del poder”.
IGNACIO MIER ABRIÓ CAJADE PANDORA DEL PARAISO DE LOS FIDEICOMISOS
Lo anterior viene a colación con lo expuesto por el coordinador de los legisladores de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco, quien hace más de dos meses “abrió la caja de Pandora” de los 13 fideicomisos que maneja el Poder Judicial de la Federación.
Además, “los reto a que demostraran que era falso el destino de esos recursos”.
Dio paso a los números duros.
Seis fideicomisos manejan 6 mil millones de pesos en beneficio de 11 Ministros –en activo- y 22 en retiro, para compensaciones extra pensiones, jubilaciones, gastos médicos.
Lujos y excesos para 33 Ministros, quienes tienen una jubilación de 36 mil pesos por parte del ISSSTE, más los 300 mil pesos que reciben del Poder Judicial Federal, vía fideicomisos.
Más 149 millones para gastos médicos extraordinarios, que incluye cirugías plásticas.
Y 382 Magistrados con una bolsa de 4 mil millones de pesos para pensiones y jubilaciones, aparte de los 26 mil pesos que les da el ISSSTE, reciben 120 mil pesos
Clarificó, sueldos y prestaciones de los 55 mil trabajadores del Poder Judicial no se tocan, son respetados absolutamente.
¿Quién miente?
¿Quién dice la verdad?
Ahí están los hechos.
Cifras y números.
¿Quién ganará?
¿Quién perderá?
Al tiempo.
