Con sentimientos de profunda alegría filial, la Arquidiócesis de Puebla se unió al júbilo de la Iglesia universal por la elección de Su Santidad León XIV como nuevo Pontífice, sucesor del Apóstol Pedro y Papa número 267 en la historia de la Iglesia católica.
Desde el anuncio oficial del Habemus Papam, las comunidades católicas de Puebla manifestaron su emoción con un repique festivo de campanas en todos los templos del estado, como símbolo del gozo que embarga a los fieles ante la llegada del nuevo Vicario de Cristo.
En un comunicado, la Arquidiócesis expresó su compromiso de elevar oraciones por el Santo Padre en todas las eucaristías celebradas a partir de este día. Se pide a Jesús, el supremo Pastor, que derrame sobre León XIV las gracias necesarias para guiar a la Iglesia en los desafíos actuales: construir la paz entre las naciones, promover la reconciliación y ser un vínculo de unidad en un mundo fragmentado.
Asimismo, se encomienda al nuevo Papa ser un maestro de humanidad, cercano y misionero, capaz de hablar a las nuevas generaciones con lenguajes contemporáneos, y convertirse en signo de esperanza para todos los pueblos.
La Iglesia que peregrina en Puebla manifestó su respeto, afecto y obediencia al Santo Padre, reconociendo en él la continuidad del ministerio confiado por Cristo a Pedro. Citando el canon 331 del Código de Derecho Canónico, se reafirma que León XIV, elegido legítimamente por el Colegio Cardenalicio, es “cabeza del Colegio de los Obispos, Vicario de Cristo y Pastor de la Iglesia universal en la tierra”.
Con este espíritu de unidad, la comunidad católica de Puebla celebra al nuevo Pontífice con fe, esperanza y renovado compromiso con la misión evangelizadora de la Iglesia.