Por: Jorge Pinto Tepoxtecatl
A nivel mundial, una de cada cinco personas ha experimentado discriminación racial o étnica. En México, al menos 10 millones 895 mil personas de 18 años y más han mencionado haber enfrentado actos de discriminación racial, una tendencia (13.1%) que ha perdurado por cinco años, de acuerdo con las estimaciones más actuales del INEGI. Además, las personas afrodescendientes e indígenas suelen ser las más afectadas.
El racismo y la discriminación racista se ejercen por factores como la apariencia física, la vestimenta, la forma de comunicarse y el tono de piel. En México, el 70.8% de la población se identifica dentro de los tonos de piel más oscuros y medios, según la metodología de la ENADIS.
El Comité de Derechos Humanos del Sistema de Naciones Unidas, ha definido a la discriminación como:
[…] toda distinción, exclusión, restricción o preferencia que se basen en determinados motivos como la raza, el color, el sexo, el idioma, la religión, la opinión política o de otra índole, el origen nacional o social, la posición económica, el nacimiento o cualquier otra condición social y que tenga por objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos humanos y libertades fundamentales de todas las personas.
De acuerdo al último informe 2024 de Amnistía Internacional denominado ¨La Situación de los Derechos Humanos en el Mundo¨ Análisis Global y Perspectivas Regionales, señala que, el racismo y otras formas de opresión han seguido determinando los planteamientos de muchos países en materia de asilo y migración. Las políticas y prácticas discriminatorias afectan en forma desproporcionada a grupos de personas migrantes, refugiadas y otras personas no ciudadanas, por ejemplo: Estados Unidos de Norteamérica, suspendió en la frontera con México la entrada de personas solicitantes de asilo y esa determinación dejo expuestas a las personas a ser objeto de extorsiones, secuestros, violencia de género y sexual. En el caso del continente Americano, Amnistía Internacional señala que, los organismos encargados de hacer cumplir las leyes, se han centrado en las personas afrodescendiente, afectándoles desproporcionadamente en países como Brasil, Ecuador y Estados Unidos de Norteamérica.
En agosto del 2024, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, reconoció que el racismo estructural y la discriminación racial representan obstáculos para el disfrute pleno de los derechos de las personas afrodescendiente y las comunidades tribales y pidió a los Estados que aplicaran una justicia restaurativa integral.
Tanto la no discriminación como el derecho a la igualdad, se encuentran previstos en tratados internacionales, como la Carta de Naciones Unidas, la Convención Americana de los Derechos Humanos (CADH), así como, la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (1979) (CEDAW). En el caso de nuestra ley fundamental, dichos derechos, se encuentran previstos en el artículo 1º y el 4º, señalan que queda prohibida toda discriminación…y que el varón y la mujer son iguales ante la ley…
Debemos tener presente que los derechos humanos son ambivalentes, esto quiere decir, que no solo son derechos, sino también son deberes, y así como es nuestra potestad exigir respeto, también debemos respetar la diversidad de ideas, el libre desarrollo de la personalidad y la diversidad sexual, la libre creencia religiosa, entre otros.
La discriminación es un fenómeno que se encuentra presente en el ámbito laboral, deportivo, cultural, social, académico, entre otros, es por ello que, se deben replantear las estrategias y las formas de promover la cultura de la inclusión para terminar con toda clase de discriminación, de rechazo a grupos de población vulnerables, por lo tanto la educación juega un papel preponderante, ya que, a través de ella se van incorporando aspectos como la diversidad, el pluralismo democrático, la educación intercultural, multicultural, pluricultural o transcultural con lo que, se puede contribuir a promover el respeto a los derechos humanos y ayudar a erradicar la discriminación en todas sus formas.
- Es Doctor en Derecho y miembro del Instituto
Latinoamericano del Ombudsman.
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